Beatrice Steele, del pequeño municipio de Swampshire, en la campiña inglesa, nunca ha encajado en la definición de una verdadera dama según el estricto código de conducta que allí rige: no sabe coser ni tiene talento para la música. Vive sin sobresaltos junto a su madre, cuya única obsesión es conseguir un buen partido para sus hijas; su padre, un bromista sin remedio, y sus dos hermanas menores. Sin embargo, Beatrice esconde un secreto: sueña con resolver casos de crímenes reales sobre los que lee en el periódico e incluso ha llegado a cartearse con un inspector de Londres. Si alguien se enterara de su extraña afición, todos la considerarían un bicho raro y sería expulsada para siempre de su respetable círculo social.
Cuando un misterioso detective caído en desgracia se deja ver sin motivo en Swampshire durante el gran baile de otoño, y el soltero de oro con quien su madre quiere casar a su hermana Louisa se desploma en medio del salón, Beatrice intuye que están atrapados en la mansión con un asesino y que es la oportunidad perfecta para resolver un crimen.