En Montevideo el enemigo estaba en todos lados. Lo difícil era identificarlo. Y por más que el nuevo presidente de la República procuraba trasmitir firmeza y tranquilidad, la mayoría de los ciudadanos sabían que de un momento a otro la sangre volvería a manchar los adoquines de las calles. Tal vez, porque la paz fue proclamada tantas veces, como violada. Así recrea Diego Fischer el clima y la desazón que se vivían en el Uruguayde la segunda mitad del siglo XIX.
Bernardo Berro es el protagonista de esta cautivante historia. Un hombre ilustrado que anhelaba ser campesino y vivir en comunión con la naturaleza y llegó a ser el quinto presidente constitucional de la República. Un sembrador de robles, árboles de noble madera, como sus propósitos. Luchó con toda la fuerza de las ideas contra el vendaval que signó su trayectoria política para terminar arrebatándole la vida.
Una historia narrada a ritmo de vértigo, en un lenguaje directo y con recursos propios de una novela. Es así que el autor logra pintar una época de dolor y de violencia en la que las divisas históricas fueron dándole forma y sustento al Uruguay.
En Qué poco vale la vida salen a la luz por primera vez documentos y cartas que durmieron en un archivo privado durante más de un siglo y medio, y brindan una removedora e interpelante mirada sobre las páginas más sangrientas de nuestro país en el siglo XIX.
La muerte solo trae muerte, el odio engendra más odio. Una y otro se alimentan con la violencia, sostiene el autor para descubrirnos que hay hombres que hacen la historia y que luego son olvidados, porque resulta incómodo recordarlos. Vale la pena descubrir su legado