Transcurre una apacible tarde de verano en Wentworth, Ohio. Como es habitual, en la soleada calle Poplar todo es normal: el chico de los periódicos hace el reparto en bicicleta, los niños juegan en las aceras, las barbacoas se preparan en los jardines y patios. Lo único extraño es la furgoneta roja que hay aparcada en una esquina. El misterioso vehículo no tardará en ponerse en marcha… y con él se desencadenará una atroz matanza.
Cuando la noche caiga, los supervivientes del vecindario se encontrarán en un mundo pavoroso donde cualquier cosa es posible, en particular la macabra posesión de las mentes y de los cuerpos.