Casey Carter fue condenada a prisión por el homicidio de su rometido, el famoso filántropo Hunter Raleigh III. Un crimen que entonces negaba y aun hoy niega haber cometido. Quince años después, cumplida su condena, todavía no se ha librado de las miradas de quienes la consideran una asesina.
Su historia parece un caso ideal para el programa televisivo dirigido por Laurie Moran, Bajo sospecha. Es la última oportunidad de Casey para limpiar su nombre. Laurie promete hacer todo lo posible para conseguirlo.
La reportera investigadora, sin embargo, deberá enfrentarse a un nuevo y ególatra jefe, a un columnista de chimentos cuya curiosidad no parece conocer límites y a la mala reputación de la mujer a quien ha decidido ayudar. Todo ello para hacer lo que considera correcto y demostrar por fin la inocencia de Casey… si es que alguna vez fue inocente.