Lo esperaré aquí.
Le diré cuánto lo quiero.
Prometeré quejarme menos.
No ser esclava de mi trabajo.
Pensar en nosotros. Sí.
Sí…
Mañana le diré todas esas cosas…
Y se quedará.
¿Se puede ser fiel a uno mismo cuando lo que está en juego es el amor?
Haciendo gala de una destreza excepcional, Elísabet Benavent golpea el corazón de los lectores con una historia de saltos en el tiempo que reconstruye de forma hilarante y aleatoria los momentos estelares de una relación de pareja.