Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación difícil. Era, para mí, cuestión de vida o muerte. Tenía agua apenas para ocho días. La primera noche dormí sobre la arena a mil millas de toda tierra habitada. Estaba más aislado que un náufrago sobre una balsa en medio del océano. Imaginaos, pues, mi sorpresa cuando, al romper el día, me despertó una extraña vocecita que decía: -Por favor…, ¡dibújame un cordero!
Un libro de 64 páginas en el que se ha dado volumen a casi todas las acuarelas originales. Cada página de esta nueva edición ha sido animada con virtuosismo y delicadeza para transmitir toda la poesía de la célebre obra de Saint-Exupéry.
Una magnífica versión para los lectores más jóvenes y para aquellos que aún no han sido seducidos por la magia de este singular libro.