La curiosidad mató al gato… Bum Yoon se cuela en la casa de Sangwoo, el chico con el que está obsesionado, y al bajar al sótano descubre que bajo su físico atractivo y su carisma se esconde un terrible criminal.
Pero ya es demasiado tarde para huir: de repente, Sangwoo aparece y lo encierra. Solo cuando Bum Yoon promete que no intentará escapar, su raptor le permite salir del sótano y moverse por la casa. En ese momento da comienzo una extraña y tensa convivencia, digna de la relación entre un amo psicópata y su criado. Pese al miedo y su carácter pusilánime, Bum Yoon sabe que tiene que salir de esa casa como sea…