Tessa Cade ha pasado de ser una proscrita a consejera del palacio, pero incluso con su recién descubierto poder, no puede detener la enfermedad que todavía se sigue propagando. El príncipe Corrick está intentando gobernar de una manera diferente, pero no es fácil reparar la grieta que existe entre la realeza y el pueblo; ni la que va creciendo entre Tessa y él.
Con los suministros de flor de luna agotándose, Tessa se embarca con el príncipe Corrick en un viaje incierto al misterioso reino vecino de Ostriarty. Esta podría ser su única oportunidad para salvar a la gente de Kandala, pero supondría un peligro incalculable tanto para Tessa como para el príncipe, mientras viajan por aguas peligrosas y se enfrentan a los sentimientos que tienen el uno por el otro. Nadie es quien parece ser, y las consecuencias serán peligrosas e impredecibles.
Ha llegado la hora de alzarse y defender el alba